Yemen jugó un papel crucial en el nacimiento y la difusión mundial del café, especialmente a través del puerto de Mokha. Los mercados árabes y los caravaserais contribuyeron a transformar el café en un fenómeno social y cultural, fomentando el intercambio de ideas y tradiciones. La herencia cultural del café sigue dando forma a la identidad del mundo árabe, evidenciando su importancia económica y social duradera.